Hoy es - ¡Este es el día que hizo el Señor!

junio 11, 2013

Música CRISTIANA o música PROFANA? ¿Cuál decides interpretar?

¿Cómo usas los talentos que Dios te ha dado?  
¿MÚSICA PROFANA? ¿CÓMO ASÍ?
En nuestro castellano, el término "profanoabarca en sí mismo varios significados. Pero tomaré del diccionario específicamente este: "Que no es sagrado, ni tiene relación con las cosas sagradas, ni sirve a usos sagrados, sino puramente secular." (A eso me he referido con el título de este post).

Dentro de esta acepción, los propios musicólogos han clasificado cierto tipo de música como "música profana"; y cierto tipo de música como "música sacra o sagrada".Y como una rama de esta última, queda incluida la "música cristiana".

Ahora bien, el hecho de que una música sea clasificada dentro del ámbito musical como profana, no implica necesariamente que sea una música sacrílega, que va contra Dios, o que lo ofende. (Nótese que dije no necesariamente, porque aunque no siempre es así, en ocasiones sí sucede de esa forma).

Pero bueno, dicho de manera simple, como música PROFANA se designa a todo tipo de música que no sea de tema ni índole religioso. En otras palabras, se refiere de manera general a la música secular (o seglar, que es lo mismo) y, en muchos casos, incluso a la música popularAsí, para efectos prácticos, decir "música profana" es lo mismo que decir "música secular".

Y por música SACRA o SAGRADA se entiende todo tipo de música que, de una u otra forma, se considera ligada a Dios, a la religión (sea cual fuere ésta) o a símbolos religiosos (fiestas religiosas, santos, etc.).

Explico todo lo anterior como punto de partida, para darme a entender mejor en lo que será el meollo de este artículo que lees hoy:
Considero que actualmente existe en muchas iglesias cristianas evangélicas una "profanización" de ciertos músicos y cantantes cristianos (utilicé el término "profanización" por llamarlo de algún modo, aunque esa palabra no exista en el español).
Digo esto de "profanización" en el sentido de que, siendo la música la profesión laboral de muchos cristianos, éstos no solo tocan y cantan música cristiana, sino que lo hacen por igual en el ámbito secular, con música que no tiene nada que ver con Dios o con el cristianismo.

Ahora bien (y no me mal entiendan), en muchos casos, lo anterior NO ES MALO. Pero en muchos otros casos, SÍ ES MUY MALO. Y antes de que me tilden de "espirifláutica" (por un extremo), o de legalista o farisea (por el otro extremo), permítanme aclarar un poco más a qué me refiero. Veamos:

1. CUÁNDO NO ES MALO que un cristiano toque, cante o haga música que no es cristiana:
Estoy convencida de que la música se la dio Dios al ser humano como una de las muchas maneras de darle honor a él. Ese es el origen, razón y propósito principal de la música: exaltar a Dios. (Mira aquí más de este tema).
 Así que, muy por encima de todo, nuestra música debe ser, preminentemente, música para exaltar a Dios.
Pero además de eso, el Señor (Creador y Artista por excelencia), también nos ha concedido la música como una forma de expresión y un lenguaje universal del ser humano, siendo una hermosa forma de arte. (Mira aquí más de este tema).
La música que escuchemos, compongamos, toquemos o
cantemos nunca debe ser música que desagrade a Dios.

Y en ese sentido, pienso que, como cristianos, también podemos hacer otro tipo de música que, aunque no le rinda directamente honor al Señor ni transmita expresamente mensajes cristianos, aún así, sea una música que pueda expresar igualmente otras cosas (siempre y cuando no sean malas cosas).

Es decir, independientemente de que nuestra música en un momento dado no sea toda directamente para Dios, sino para otros propósitos (también sanos), siempre deberá cumplir el requisito de ser una música que no le desagrade el Señor. Ese es el meollo del asunto.

Es que cualquier música que elijamos escuchar, componer, tocar o cantar, jamás debería ser música que desagrade a Dios.

¿ES MALA TODA LA MÚSICA SECULAR?
No toda la música secular es "mala"; así como tampoco toda la música catalogada como cristiana es siempre "buena".
No toda la música secular es mala; así como tampoco toda la música catalogada como "cristiana" es siempre  buena.

Existe música y canciones no cristianas que no son en sí malas ni nocivas. Por ejemplo, hay música romántica que habla del amor puro y limpio entre el hombre y la mujer, o el amor entre la familia, padres, hijos, etc. Hay música que exalta valores morales y principios éticos. Hay música que promulga la conciencia social o ecológica, la alegría por la vida o el amor a la patria. Hay música con propósitos didácticos o propósitos recreativos sanos. Es más, hay música comercial y popular que tampoco exalta pasiones desordenadas, violencias, vicios, traiciones, engaños, venganza, ni cosas malas en general.

Las anteriores son todas tipos de música "profana" (o secular, que es lo mismo), pero que no conllevan en sí mismas pecado, ni tampoco exaltan temas pecaminosos ni hablan de ellos. Podríamos decir que es música que no alaba a Dios, pero que tampoco le ofende.

Por eso, si un cristiano que es músico o cantante profesional se dedica como modus vivendi a componer, interpretar o participar en la interpretación de música secular sana (y recalco, sana) no podemos juzgarle ni decir que está haciendo mal. Al fin y al cabo éste estudió y escogió la Música como su profesión; y por tanto, de ésta va a derivar su sustento económico para sí y para su familia.

Ahora bien, eso nos lleva al otro punto, a la otra cara de la moneda. Veamos.

1. CUÁNDO SÍ ES MALO que un cristiano toque, cante o haga música que no es cristiana:
Cuando un cristiano, como medio de trabajo, se dedica a componer, tocar o cantar música que desagrada a Dios (ya sea por el contenido de su mensaje o por el uso que se le va a dar a ésta), entonces ya el asunto es totalmente diferente. En estos casos, esa "profanización" de ese músico y/o cantante cristiano es mala, muy mala. Y creo no equivocarme al decir que esto también le desagrada a Dios.

¿Música agradable o desagradable ante Dios? ¿Cuál decides interpretar?

¿CÓMO DISCERNIR ENTRE LO QUE ES CORRECTO Y LO QUE NO LO ES?

Para ilustrar mejor lo anterior, veamos algunos ejemplos hipotéticos (pero que bien podrían ser muy reales).

Si un cristiano, que es músico de profesión, tiene un estudio de grabación y se dedica a hacer arreglos musicales y a grabar producciones, debe ser selectivo con los trabajos que decide aceptar y llevar a cabo.

Por ejemplo, si lo contratan para hacer el "jingle" musical de una campaña publicitaria para una marca de mayonesa, para una cadena de supermercados, para una línea de automóviles, o para una marca de zapatillas deportivas (por ejemplo), no veo nada incorrecto en eso, pues son productos que en sí no conllevan algo malo.

Los cristianos que son músicos, arreglistas, compositores o cantantes
de profesión deben ser selectivos con los trabajos
que deciden llevar a cabo.
Pero si a ese mismo cristiano lo vienen a contratar para que elabore una canción para la campaña publicitaria de, por ejemplo, una marca de cerveza o de cigarrillos; de un casino, de una discoteca o de la lotería; o bien, para anunciar el próximo espectáculo de un adivino, de un astrólogo, o de una vedette; o para publicitar unos carnavales, unas fiestas patronales religiosas de algún "santo" o "virgen"; o una película o un show de un tema que riñe con los principios cristianos; entonces, en casos así, este músico cristiano ni siquiera debería pensarlo dos veces para rechazar tales ofertas de trabajo.

Y no solo está el caso de aquellos productos que claramente riñen con los principios cristianos. También sucede que hay comerciales que anuncian un producto "limpio" (por así decirlo), pero el anuncio en sí  está enfocado en un mal sentido. Por ejemplo, un comercial de llantas de automóvil que va ligado a una exuberante mujer, presentada insinuantemente, como suelen hacer. En este caso, aunque el producto en sí (los neumáticos) no tiene nada de malo, sí lo es el enfoque mismo del comercial.


Un cristiano debería siempre recordar que, si es músico, lo es porque DIOS LE REGALÓ ESE DON; y no es para que lo use en ese tipo de cosas nocivas y contraproducentes (sin importar cuán atractiva sea la suma de dinero que le ofrezcan por ello).

Igualmente, si un cantante o artista mundano quiere contratar los servicios de un músico arreglista cristiano y de su estudio de grabación para llevar a cabo su última producción musical; pero ese cristiano sabe muy bien que la línea musical que sigue ese cantante en particular exalta las pasiones desordenadas, el sexo ilícito, la vulgaridad, la violencia, la idolatría, los vicios, o cosas así; entonces, pregunto yo, ¿cómo puede dicho cristiano prestarse para esas cosas?

De manera similar, si un cristiano que es cantante o músico decide formar parte de una banda o grupo musical secular, como un trabajo del cual devengar su sustento, pienso yo que primero debería averiguar y saber bien qué tipo de línea de pensamiento sigue tal agrupación. 

Es decir, debería conocer cuál es la temática general de sus canciones, cuáles son los principios morales y éticos de sus integrantes, etc. Y por supuesto, debe dejar bien sentado ante ellos cuáles son sus propias creencias y qué tipo de música él no interpretaría. Por ejemplo, canciones que traten de adulterio, engaños, violencia, pasiones desordenadas, malicia, insinuaciones de doble sentido, envidia, venganza, o tantas y tantas cosas así como esas. Y si ese grupo tiene temas así dentro de su repertorio, no creo que sea prudente ni correctamente moral que un cristiano tome parte en ello. Si lo hace, es más que seguro que al final terminará "vendiendo" sus principios cristianos, so pretexto de "cumplir" con su trabajo o contrato musical.

Tu norte debería ser que toda la música que entre en ti glorifique a Dios, tanto como aquella que sale de ti.
Que toda la música que entre en ti glorifique a Dios tanto como aquella que sale de ti.

Es como dijo el apóstol Pablo:

"Si, pues, coméis o bebéis, o hacéis otra cosa, hacedlo todo para la gloria de Dios."
1 Corintios 10:31
Esto significa que aún en las cosas seculares y del diario vivir, también nuestros actos deben dar gloria a Dios. Es que no solo le damos gloria a Dios directamente cuando lo expresamos verbalmente, sino que también rendimos honor a Dios en nuestras tareas del día a día, haciendo las cosas bien y haciéndolo lo mejor que podamos. Eso habla bien de nosotros como personas y como hijos de Dios que somos. Y por consiguiente, también habla bien de Dios y le trae gloria a él.

Es decir, un cristiano puede (y debería siempre) traerle gloria a Dios aún en medio de sus ocupaciones diarias, e incluso, sin necesidad de palabras. Cuando un albañil levanta una pared con precisión y a conciencia; cuando un ama de casa prepara una lasagna con todo su empeño y amor; cuando un estudiante prepara  con excelencia un ensayo que le fue encomendado; cuando un dentista realiza una trabajo de calidad al hacerle una calzadura de muela a su paciente; cuando un maestro le enseña a leer a sus alumnos con toda paciencia y claridad; en todas estas cosas, si un cristiano lo hace así, traerá gloria a Dios en su trabajo diario.

Sin embargo, pregunto yo, ¿cómo podría cumplirse este mandato de "hacer TODO para gloria de Dios" en el caso de un cristiano que compone, toca o canta una canción con toda la excelencia musical posible, pero lo hace con una canción cuyo mensaje riñe con los principios cristianos o que incluso, le desagrada a Dios? ¿Cómo va ese hermano a decir que eso lo hizo "para gloria de Dios", si el producto en sí es desagradable a Dios? No podemos vivir con un doble discurso. Lo negro es negro y lo blanco es blanco. Para con Dios no hay grises. O le trae gloria a Dios o no le trae. Punto. No hay términos intermedios. O es frío o es caliente. Pero lo tibio no lo acepta Dios.

"Pero por cuanto eres tibio, y no frío ni caliente, te vomitaré de mi boca."
Apocalipsis 3:16

Tenemos que mantener nuestros principios cristianos en todo momento, aún en nuestro desempeño en el ámbito secular. Conozco de primera mano el caso de un hermano cristiano que trabaja en ingeniería electrónica. Él diseña y construye sistemas electrónicos específicos, según los requerimientos del cliente. Una vez un intermediario le pidió que diseñara un sistema electrónico especial para un establecimiento comercial. Pero durante la negociación se enteró de que dicho sistema era para usarse en una casa de citas de ocasión o burdel. Automáticamente rechazó la oferta, aunque podía ganar buena suma de dinero, y aunque el dispositivo electrónico en sí que él construiría no era malo. Lo malo era el negocio para el cual lo usarían.

En otro momento, una reconocida agencia de venta de automóviles reposeídos le pidió a este mismo ingeniero que les diseñara un dispositivo para hacer retroceder el contador electrónico del kilometraje de los autos que pondrían a la venta (para hacerlos parecer como menos usados). Aunque para él era un proyecto fácil de realizar y le pagarían muy bien, no aceptó tomar ese contrato porque obviamente, ese tipo de estafa comercial iba contra sus principios cristianos.

Quizás otro se hubiese justificado para consigo mismo pensando: "Bueno, el aparato que yo diseñaré no es malo. Yo no soy responsable de los usos que ellos le darán; así que no hay nada malo en que yo lo haga".  ¡Respuesta incorrecta! Dios conoce las intenciones de nuestro corazón y no puede ser engañado.

Si hacemos algo con limpieza de corazón y, por alguna razón, somos engañados y no sabemos el mal que está detrás de ello, no tendríamos culpa para con Dios. Pero si ya conocemos el trasfondo dudoso que hay tras de eso y aún así participamos de ello, nos hacemos cómplices, y no seremos libres de culpa:

"Si algún incrédulo os invita, y queréis ir, de todo lo que se os ponga delante comed, sin preguntar nada por motivos de conciencia. Mas si alguien os dijere: Esto fue sacrificado a los ídolos; no lo comáis, por causa de aquel que lo declaró, y por motivos de conciencia.."
1 Corintios 10:27,2
De manera similar ocurre en el ámbito de la música secular.
Un músico, cantante o compositor cristiano debe ser selectivo con la música que cantará, tocará o compondrá. La música en sí no es mala. Lo malo es el mensaje que le añadimos, así como el propósito para el cual será usada.

Y si sabemos que se tratará de música y canciones que no van a agradar a Dios (por el contenido de éstas), o que van a usarse para fines insanos o ilegítimos, ¿cómo podemos entonces dedicarnos a hacerlas, tocarlas, cantarlas o venderlas, si es que decimos llamarnos salmistas, "levitas", adoradores, ministros de alabanza o incluso cristianos? ¿Qué crees tú que pensaría Dios si lo haces? ¿Crees que eso le agradaría a él? Y si sabes dentro de ti que Dios lo desaprueba, entonces, no lo hagas. Así de simple.

La anterior es la pregunta que le lanzo a aquellos músicos que tocan para Dios en las iglesias, pero que tocan por igual para el mundo música y canciones que abiertamente desagradan a Dios. ¿Será acaso que el atractivo económico o las "luces" del espectáculo pueden más que la motivación de guardarse en integridad para Dios?

Debemos aprender a discernir entre lo que agrada a Dios y lo que le desagrada. Y no solo DISCERNIR, sino también ACTUAR consecuentemente con ello.

Creo que a la postre todo se reduce a preguntarnos a nosotros mismos una sola cosa: ¿ESTÁ DIOS DE ACUERDO Y ME DA SU APROBACIÓN EN ESTO QUE ESTOY HACIENDO? Si la respuesta es no, entonces bien sabemos cómo debemos proceder. Y si no, no nos quejemos después cuando vengan las consecuencias negativas. 

Quizás éstas tarden tiempo en llegar, pero de seguro, el tiempo nos pasará la factura. Eso ténganlo por seguro. Dios no puede ser burlado. Todo lo que el hombre siembre, eso también cosechará  (Gálatas 6:7)

Si hacemos algo que sabemos es incorrecto ante Dios (y me refiero específicamente ahora en el ámbito musical secular), cómo podríamos decir que lo hacemos "para el Señor". En ninguna manera podríamos ofrecérselo a él. Más bien lo haríamos para los hombres, o para nosotros mismos.

"Y TODO lo que hagáis, hacedlo de corazón, como para el Señor y no para los hombres; sabiendo que del Señor recibiréis la recompensa de la herencia, porque a Cristo el Señor servís. Mas el que hace injusticia, recibirá la injusticia que hiciere, porque no hay acepción de personas."
Colosenses 3:23-25

La palabra de Dios nos reitera en varias ocasiones acerca de la importancia de juzgar y discernir entre lo que es correcto y lo que no lo es:

"Y enseñarán a mi pueblo a hacer diferencia entre lo santo y lo profano, y les enseñarán a discernir entre lo limpio y lo no limpio."

Ezequiel 44:23

"...Para poder discernir entre lo santo y lo profano, y entre lo inmundo y lo limpio, y para enseñar a los hijos de Israel todos los estatutos que Jehová les ha dicho por medio de Moisés."

Levitico 10:8-11
Entonces os volveréis, y discerniréis la diferencia entre el justo y el malo, entre el que sirve a Dios y el que no le sirve."
Malaquías 3:18

LOS PELIGROS DE LA INDUSTRIA SECULAR DE LA MÚSICA PARA LOS CRISTIANOS que trabajan en ella:
La industria comercial de la música del mundo
es hoy un sistema mayormente insano.
Gústenos o no, la industria comercial de la música del mundo es actualmente un sistema mayormente insano, gobernado por el mercantilismo y el dinero, y en donde están entronizados el sexo, los vicios, la vanagloria y el delirio por la fama y el poder. 

El mundo musical del espectáculo secular está de por sí corrompido y muchos se dejan contaminar y llevar por él. En ese mundo existe una delgada línea entre lo sano y lo insano, la cual es tan difusa, que muchos cristianos no la saben definir (o no la quieren definir). Una cosa va llevando a la otra y terminan envueltos en lo que no deben.

Así que, si no sabes manejarte dentro de ese mundo y a la vez mantenerte íntegro para Dios, mejor  no te metas en lo que no debes, y dedícate solo a servirle a Dios con el talento que él te ha dado. No sea que tu talento se convierta en piedra de tropiezo para ti mismo, porque no lo supiste utilizar bien.

"Por tanto, si tu mano o tu pie te es ocasión de caer, córtalo y échalo de ti; mejor te es entrar en la vida cojo o manco, que teniendo dos manos o dos pies ser echado en el fuego eterno. Y si tu ojo te es ocasión de caer, sácalo y échalo de ti; mejor te es entrar con un solo ojo en la vida, que teniendo dos ojos ser echado en el infierno de fuego."
Mateo 18:8-9

Y no es que yo sea extremista. Así es la cruda realidad. Ahí están los casos documentados de afamados artistas que un día fueron cristianos o que empezaron su carrera musical cantando en sus iglesias. Pero no supieron lidiar con la gloria y la fama, las luces del espectáculo o el poder de las riquezas que ello les proporcionaba. Finalmente, un día se olvidaron de servir y honrar a Aquel que les concedió ese hermoso don. Lamentablemente, aunque Dios les dio ese talento para la gloria de Él, ellos prefirieron buscar su propia gloria. 

Ese fue el caso de muchos. Pero, para muestra, ahí está un botón: Eso les pasó a Elvis PresleyWithney HoustonBrandyDionne WarwickDonna Summer, entre muchos otros.


¿Y QUÉ HAGO ENTONCES, SI ÉSTA ES MI PROFESIÓN?

"¿Y entonces, de qué vamos a vivir, si la música es lo que sabemos hacer?", me dirán algunos. "Si siempre rechazo esas "dudosas" oportunidades de trabajo, entonces, ¿cómo pongo pan en mi mesa?"

Dios es bueno y abrirá las puertas correctas para sus ministros de la música que decidan guardarse para él, aún dentro del ejercicio secular de su profesión.

Es cuestión de hacer una decisión y mantenerla, contra viento y marea, y no claudicar. Por eso Josué retó al pueblo a escoger:

"...Escogeos hoy a quién sirváis... pero yo y mi casa serviremos a Jehová."
Josué 24:15



Y el Señor va a respaldar a aquellos que, por encima de cualquier otra cosa, deciden guardarse en integridad para él, :

"Entonces los que temían a Jehová hablaron cada uno a su compañero; y Jehová escuchó y oyó, y fue escrito libro de memoria delante de él para los que temen a Jehová, y para los que piensan en su nombre. Y serán para mí especial tesoro, ha dicho Jehová de los ejércitos.."
Malaquías 3:16,17

Como bien expresé un poco más arriba, sé que existe música secular que no es mala en sí misma. Y si estos músicos o cantantes cristianos se valen de ese tipo de música secular sana como su línea de trabajo, como su modus vivendi, no hay mal en ello.


El mal está cuando tocan o cantan por igual todo lo que les venga a la mano, y peor aún, se van sumergiendo poco a poco en ambientes y entornos malsanos, como bares, discotecas y shows mundanos, en donde las cosas que se promueven los suelen llevar a corromperse.

Allí es común que estén expuestos a tentaciones morales, vicios y otras cosas negativas. Quizás al principio esas malas cosas solo las ven, pero no las practican. Pero poco a poco se les va endureciendo la conciencia, al punto en que después ya no lo ven como malo, aunque tiempo atrás, esas cosas los hubieran escandalizado. 

Y lo anterior no es cuestión ligera. Bien dijo el apóstol Pablo lo siguiente:

"Y como ellos no aprobaron tener en cuenta a Dios, Dios los entregó a una mente reprobada, para hacer cosas que no convienen... quienes habiendo entendido el juicio de Dios, que los que practican tales cosas son dignos de muerte, no sólo las hacen, sino que también se complacen con los que las practican."
(Romanos 1:28,32)

Por esos mismos compromisos laborales, terminan entrando a lugares en donde su Señor Jesucristo jamás entraría. (Corrijo, quizás Él sí entraría allí, pero a predicar; nunca, a participar en las malas obras de los que allí están).

Yo solo sé que la Biblia me enseña que "es necesario obedecer a Dios antes que a los hombres" (Hechos 5:29). Y no es que yo sea legalista ni farisea; es lo que el Señor nos manda. Cuando llegamos al punto de una disyuntiva entre hacer lo que agrada a Dios o lo que le desagrada a él, creo que es obvio cuál debería ser la decisión de un cristiano que en verdad teme y sobre todo, que ama a Dios.

Volviendo al tema de la música, cuando un cristiano forma parte de bandas o grupos musicales seculares siempre existe un compromiso laboral con el grupo; porque, al fin y al cabo, son contratos de trabajo como cualquier otro, y se les paga por ello. Y es precisamente ese compromiso laboral con el grupo lo que les orilla a interpretar cualquier música

Es que aunque estos cristianos sepan que una determinada canción va a desagradar a Dios (y sé que saben muy bien cuando es así), no le dicen al resto de su grupo que no tocaran "equis" o "ye" canción del repertorio. Como son parte del grupo, interpretan todo lo que venga: lo bueno y lo malo. No lo pasan por un filtro. Y allí está el problema.

Lastimosamente hay muchos músicos, compositores y cantantes cristianos a los cuales les da lo mismo lo uno o lo otro y no pasan por un "filtro" espiritual (ni siquiera moral) la música secular que harán o que interpretarán. Es como el caso del refrán que dice: "Al son que me tocan bailo". O parafraseándolo para este caso, quizás sería: "El son que me pidan toco".

Aprende a desechar aquella música que no te atreverías a cantar frente a la gente de tu iglesia.
Al menos como punto de referencia, aprende a desechar aquellas canciones que no te atreverías a interpretar frente a tu pastor o a ante la gente de tu congregación.

En lo personal, me resulta ilógico e irreverente el hecho de que un domingo en la mañana estos músicos y/o cantantes cristianos estén tocando o cantando en la iglesia el himno: "¡Cuán grande es él, cuán grande es él!... Pero que la noche anterior, en una fiesta en donde les contrataron para amenizar, estuvieron tocando o cantando: "Tú me hiciste brujería", del Gran Combo.

No comprendo cómo un viernes, en el culto de la iglesia, un cantante del grupo de alabanza está tocando: "Te daré lo mejor de mi vida, te daré lo mejor cada día"... Pero al salir de allí, se va a tocar en vivo en una discoteca, en donde, a petición del público interpretará "Siguaraya", de Oscar de León (que, por si algunos no saben, esa canción habla de los poderes de una planta ligada a ritos de santería).

Igualmente, no me cabe en la mente cómo después de haber tocado o cantado en un bar-dicoteca toda la noche del sábado canciones como: "Tu cuerpo me arrebata" o "Perreando" de Don Omar,  haya "ministros" que se atreven a subir a un altar el domingo en la mañana a tocar o cantar: "Hacemos hoy ante tu altar un compromiso de vivir en santidad..." (de JAR).

Estos son simples ejemplos hipotéticos. Pero es una realidad que ciertos ministros de la música que hoy sirven a Dios como parte de los grupos de alabanza en las iglesias, se desenvuelven laboralmente bajo condidiones similares a las que acabo de mencionar.

"De una misma boca proceden bendición y maldición. Hermanos míos, esto no debe ser así. ¿Acaso alguna fuente echa por una misma abertura agua dulce y amarga? Hermanos míos, ¿puede acaso la higuera producir aceitunas, o la vid higos? Así también ninguna fuente puede dar agua salada y dulce."
Santiago 3:10-12.

El versículo anterior no solo aplica para los que cantan. Pienso que igualmente es aplicable a los músicos, pues las manos y pies que Dios les dio para interpretar sus instrumentos son para darle gloria a él. El don y el talento para la música que Dios ha depositado en músicos y cantantes cristianos (el cual muchos otros creyentes anhelarían tener para exaltar a Dios), no es para rendirle exaltación a otras cosas ni para promover cosas desagradables al Señor.

No podemos tener un "doble discurso" musical, y mucho menos, moral. O hacemos música que exalta a Dios (o que al menos hable de las cosas buenas de la vida); o hacemos música que desagrada al Señor. Pero no podemos andar en lo uno y lo otro a la vez. 

"Y acercándose Elías a todo el pueblo, dijo: ¿Hasta cuándo claudicaréis vosotros entre dos pensamientos? Si Jehová es Dios, seguidle; y si Baal, id en pos de él. Y el pueblo no respondió palabra."
1 Reyes 18:21
Además, Jesús mismo dijo:
"Ningún siervo puede servir a dos señores; porque o aborrecerá al uno y amará al otro, o estimará al uno y menospreciará al otro..."
Lucas 16:13

Y ya después de años de andar en lo mismo, finalmente muchos de estos músicos y cantantes cristianos se terminan acostumbrando a ese estilo de vida y llega el momento en que ni siquiera sienten incomodidad cuando tocan o cantan algún tipo de canciones impropias, o cuando se sumergen en ambientes viciosos de bares, discotecas y demás espectáculos mundanos. Y tristemente, al mismo tiempo la gracia y belleza de ese don y ministerio que Dios ha puesto en ellos se va apagando. 

Les sucede a muchos que terminan viendo la música en la iglesia, no como un ministerio de Dios y para Dios, sino como un trabajo más, y no hacen diferencia entre lo que es hacer música para el mundo, y lo que es hacerla para Dios. No hacen diferencia entre lo que es tocar en una tarima o escenario mundano, y lo que es tocar en un altar de Dios. Y al final, se llegan a olvidar de la santidad, pureza, hermosura y magnitud del llamado divino del Señor sobre ellos, y del precioso honor y la enorme responsabilidad que eso implica.

Y lo peor: se mal acostumbran a que los aplausos allá afuera sean para ellos y pretenden que en la iglesia también sea así; olvidándose de que acá la gloria ha de se siempre única y exclusivamente para Dios, y jamás para ellos, ni tan siquiera un poquito.

Todo cristiano, y cuánto más si es un ministro del Señor, debe tener cuidado en discernir lo que es de Dios de aquello que no lo es:

"Sus sacerdotes violaron mi ley, y contaminaron mis santuarios; entre lo santo y lo profano no hicieron diferencia, ni distinguieron entre inmundo y limpio... y yo he sido profanado en medio de ellos."
Ezequiel 22:26
"Por tanto, así dijo Jehová: Si te convirtieres, yo te restauraré, y delante de mí estarás; y si entresacares lo precioso de lo vil, serás como mi boca..."
Jeremías 15:19

Al aceptar el privilegio de formar parte del ministerio de alabanza, también
aceptas la gran responsabilidad de ser ejemplar en cada área de tu vida.

¿CÓMO BALANCEAR LA MÚSICA COMO PROFESIÓN Y COMO MINISTERIO?
     No se supone que si eres un arquitecto cristiano, solamente te dediques a diseñar iglesias, albergues para niños o centros de rehabilitación. Por supuesto que no. Si Dios te dio ese talento del diseño y estudiaste esa carrera es para que la uses para buenas cosas, las cuales pueden ser dentro de un amplio rango secular.

Pero ya siendo el caso de que te contraten para diseñar un prostíbulo, o la casa de un magnate capo de la droga, o una discoteca-bar, o para restaurar un templo dedicado a los ídolos, ¿cómo podrías involucrarte en esas cosas? Eso no sería sabio, ni prudente ni ético. Y de hacerlo, creo que Dios te pediría cuentas si lo haces, ¿no crees?

     Si eres doctor, no solo atenderás a pacientes que compartan la misma creencia o doctrina que tú. Atenderás a todos por igual, ejerciendo y honrando tu profesión. Pero si te piden que realices un aborto, una eutanasia, o bien, una cirugía de cambio de sexo, esas serían cosas que tendrías que rechazar, si es que eres un verdadero creyente que tiene temor de Dios y que le ama. Si le amas al Señor, procurarás hacer lo que a él le agrada (Juan 14:15).

    Es que en toda profesión digna existen normas éticas y morales, y ni siquiera hay que ser necesariamente cristiano para cumplir esos estándares. Y en la música es igual. Una persona con al menos la ética y moral elemental no se presta para realizar cosas que van en contra de sus principios personales. ¿Cuánto más alguien que se dice cristiano?
Tenemos el ejemplo perfecto del propio Señor Jesús. La Biblia nos dice que antes de iniciar su ministerio, él fue carpintero de profesión, al igual que su padre (Marcos 6:3; Mateo 13:55). Siendo así, seguramente muchas veces confeccionó mesas, sillas u otros implementos de madera.
Pero estoy completamente segura de que si algún extranjero vino a él alguna vez a contratarle para que le elaborase un ídolo de madera, nuestro Señor Jesús jamás hubiese aceptado tal trabajo. Al contrario, hubiese reprendido duramente a tal persona.

Así mismo, si eres músico, cantante o compositor cristiano de profesión, no se pretende que sola, única y exclusivamente te dediques a la música cristiana o "religiosa". El ideal sería ese, pero no siempre se puede. Sería grandioso que pudieses ser cantor o músico de planta en una iglesia, o dedicarte solo a realizar producciones de música cristiana. Ojalá y así fuera; pero no siempre es posible. Aún así, si eres idóneo en lo que haces, hay una amplia gama de cosas que puedes hacer, sin caer en comprometer tus principios cristianos.

Juan Luis Guerra
Está el caso de Juan Luis Guerra, quien después de haberse convertido al Señor, ahora produce música cristiana. Pero también, siendo ya cristiano, ha producido otras canciones que, aunque no tratan de temas cristianos, yo las llamaría canciones "sanas"; pues tratan temas de denuncia social (como El Niágara en Bicicleta), o los valores y las cosas buenas de la vida (Abriendo Camino, con Diego Torres). Eso es un ejemplo de saber hacer el balance correcto y producir música secular, sin caer en cosas desagradables ante Dios. Y así como él, hay varios otros.

Kirk Cameron
Podemos mencionar también a Kirk Cameron, quien desde su adolescencia entregó su vida al Señor. Antes de eso, él ya era un joven artista con una carrera ascendente en Holywood, y era el protagonista de "Cómo duele crecer" (Growings Pains), una popular serie de comedia familiar en ese entonces. Sin embargo, él dejó el reparto del programa, ya que el personaje que le tocaba interpretar, chocaba muchas veces con sus principios cristianos. Y fue duramente criticado por eso.

Pero no por eso dejó del todo la actuación. Después, él mismo protagonizó una serie familiar tipo comedia llamada "Kirk", en donde actuaba con su esposa. Dicha serie, aunque trataba de temas seculares, era una serie sana. Ha producido varias películas cristianas, como "Left Behind" (Dejados Atrás), "Praise the Lord", entre otras. Y ha participado en muchas producciones más, tanto seculares como cristianas. Entre ellas, la galardonada película "Fireproof" (A prueba de Fuego). Este joven (ahora ya un hombre) es un ejemplo de que es posible mantenerse íntegro ante Dios esté donde uno esté.

Chuck Norris
     Chuck Norris es otro ejemplo de esto. Durante décadas fue un cotizado artista de Holywood, apareciendo en múltiples películas de cine y en series televisivas. Luego de su conversión a Jesucristo, siguió produciendo películas, cambiando la violencia por mensajes positivos y temas de conciencia social. Incluso adaptó el formato de su propia serie "Walker Texas Ranger" para llevar de manera indirecta a través de ésta el mensaje del Evangelio.


También podemos hablar de escritores cristianos de renombre que, teniendo éxito en el ambiente secular, han sabido guardarse para Dios. Podemos mencionar a Max Lucado, Rick Warren y John Maxwell, que son cristianos a quienes Dios les dio el talento de escribir, y escribir bien. Ellos se cuentan entre los más renombrados autores cristianos de la actualidad. Pero aunque escriben libros sobre temas cristianos, también han escrito otros libros que no son catalogados expresamente como libros cristianos. Son libros que tratan sobre otros temas, tales como liderazgo y temas de auto-ayuda. Pero aunque en algunas de sus publicaciones no se mencione a Dios, ni se cite ningún versículo bíblico, aún así podemos encontrar en ellas la integridad de los principios bíblicos y divinos que Dios ha establecido.

  

Es que toda profesión digna y toda arte puede ser expresada por cristianos. Ojalá y así fuera siempre. A través de los años, el pueblo de Dios se ha ido dejando desplazar de ámbitos tales como las artes musicales, las artes escénicas, las artes plásticas, los deportes y la política, por irse al pensamiento extremista de que todo eso era "malo" o "pecaminoso". Y al retirarse los cristianos del ruedo en esas áreas, el mundo corrupto se entronizó en ellas.

Por eso, ahora a los cristianos les cuesta tanto introducirse, y cuánto más, sobresalir en estos medios, porque ahora la mayoría de estos sistemas suelen estar corrompidos. Y para colmo, los pocos cristianos que logran descollar en estos medios y artes seculares, manteniéndose a la vez íntegros para Dios, resulta entonces que es el mismo pueblo de Dios, sus propios hermanos en la fe, los que los señalan y acusan, en lugar de apoyarles. Como diría Trespatines: "¡Cosa más grande la vida!"

Lastimosamente, hay artistas muy reconocidos (cantantes, músicos, actores, etc.) que eran famosos en su rama dentro del mundo secular, y dijeron luego haberse convertido al Señor. Sin embargo, siguieron de lleno en ese ambiente del espectáculo y la farándula secular, al punto en que no supieron balancear esto con sus valores cristianos. Así, terminaron por cambiar su enfoque, al punto en que su propia vida cristiana se volvió "liviana". Y hoy por hoy no muestran un buen testimonio de la fe que dicen profesar. ("El que dice que permanece en él, debe andar como él anduvo." - 1 Juan 2:6)

Como muchos cristianos no saben o no pueden lidiar con las tentaciones que esos medios ofrecen, manteníendose de "una sola pieza", terminan flexibilizando sus valores y principios, al punto en que ese mundo puede más que ellos y los absorbe.

Así que no digo que no vivas de la Música. Si Dios te ha dado ese talento, úsalo. Pero úsalo para bien. La Música es lo que estudiaste y es lo que sabes hacer. Pero ten mucho cuidado con los trabajos que decidas hacer, porque tendrás que darle a Dios cuentas de todo eso. 

"Todas las cosas me son lícitas, mas no todas convienen; todas las cosas me son lícitas, mas yo no me dejaré dominar de ninguna."
1 Corintios 6:12
"Todo me es lícito, pero no todo conviene; todo me es lícito, pero no todo edifica.
Si, pues, coméis o bebéis, o hacéis otra cosa, hacedlo todo para la gloria de Dios.

No seáis tropiezo ni a judíos, ni a gentiles, ni a la iglesia de Dios."
1 Corintios 10:23,31-32

Si piensas entrar a este mundo del espectáculo secular, o ya estás dentro de él, ten presente en todo momento que estás tratando con fuego, y tal vez podrías quemarte. Ten mucho cuidado. Recuerda siempre esto:
"Por tanto, así dijo Jehová: Si te convirtieres, yo te restauraré, y delante de mí estarás; y si entresacares lo precioso de lo vil, serás como mi boca. Conviértanse ellos a ti, y tú no te conviertas a ellos."
Jeremías 15:19


Nos encantaría conocer tus comentarios...

7 Comentarios. ¿Dejas el tuyo? :

Anónimo dijo...

Impresionante me hablo el señor gracias por este aprendizaje gloria a Dios!!

Vicky dijo...

Gracias a ti, Anónimo, por tu comentario. Nos alegramos de que Dios haya tocado tu vida.
Muchas bendiciones para ti!

Marcos dijo...

Agradezco mucho... la aclaración que haces en tu blog, sobre difenciar lo bueno de lo malo, de poner a Dios en primer lugar. Dios te bendiga.

Anónimo dijo...

Que bien explicado!! Muchas gracias!!!

Anónimo dijo...

La gloria sea para Dios que Bueno saber que aun hay personas que tratan de ayudar a los demas a consagrarse para Cristo aleluya

Anónimo dijo...

Hola a todos
Les recomiendo mucho a la consertista Ayako Ishikawa (vestida de rojo) interpretar Amazing Grace
Bendiciones

Anónimo dijo...

Hola a todos
Para todos aquellos que tengan dudas con respecto a la musica (grata y no grata para Dios) les recomiendo que busquen en google o you tube Oliver Coronado y la musica
Bendiciones

Publicar un comentario

¡NOS ENCANTARÍA CONOCER TUS COMENTARIOS!
-----------------------------------------------------------
Si no tienes perfil, usa la opción Nombre/URL, con tu nombre o pseudónimo (La URL es opcional).

Ultimos Tweets: